Durante los diez primeros años de Estadio, el director Alejandro Jaramillo logró reclutar a un grupo de destacados colaboradores. En este primer equipo de colaboradores estuvo Alejandro Scopelli, exseleccionado y entrenador de fútbol argentino, que con el seudónimo de "Axel" realizaba comentarios de los partidos de fútbol y análisis tácticos y técnicos de este deporte. Otro redactor importante de esta época fue Alberto Buccicardi, exjugador y entrenador de Universidad Católica -equipo con el que, como director técnico, conquistó el Campeonato Nacional de 1949- y de la Selección Nacional en el Mundial de Brasil 1950. Buccicardi colaboró con la revista en los primeros años de la publicación y después, durante las décadas de 1960 y 1970, bajo varios seudónimos: "Albudi", "Brabante", "Borax" y "A.B.F.".

Otros periodistas que se incorporaron a la redacción de Estadio en los años '50 fueron Charles Bown ("Caracol", especialista en ciclismo y natación) y José María Navasal ("Pepe Nava" y "Juan del Potrero").

En la década de 1960 se integraron los primeros periodistas egresados de universidades: Edgardo Marín ("Edmar" y "Emar") y Julio Salviat. En esta época el semanario inició una gradual modernización: el cambio se ve reflejado en el diseño de las páginas, en la introducción de nuevas secciones como "Mini-cosas", "Página 35" y "Siete días"; y en la transformación de la primera página en un índice que acompaña una gran fotografía o el editorial.

Con todo, el cambio que mejor grafica los nuevos tiempos fue la supresión de los seudónimos. Si bien los colaboradores más antiguos ("Aver", "Jumar", "Don Pampa" y "Pancho Alsina") continuaron firmando con los nombres de fantasía por los que eran conocidos, los nuevos periodistas que se integraron abandonaron muy pronto los seudónimos. Así ocurrió con los periodistas que se incorporaron en la década del '70: Jorge Durán ("Jed"), Manuel Sepúlveda ("Maseb"), Sergio Ried ("Serdan") y André Jouffé ("Anjou"), entre otros.