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pan, techo y abrigo

"El pueblo que nosotros tenemos está hambriento, enfermo e ignorante. Necesitamos alimentarlo en condiciones tales que vuelva a ser el hombre resistente (…) Sin hombres fuertes no hay Nación ni Estado y sin hombres cultos no hay República ni Democracia." (La doctrina radical. Programa de gobierno. p. 7-8)

El Frente Popular se instaló en Chile como una propuesta política que buscó acentuar el apoyo estatal en diversos ámbitos sociales como respuesta a la crisis causada por la Gran Depresión. La década del '30 se inició con una profunda crisis económica que provocó cambios en el desarrollo nacional y suscitó la formación del Comisariato General de Subsistencias y Precios. Este organismo centralizó la regulación de precios con el objetivo de garantizar el acceso a bienes básicos de consumo. El problema de los alimentos era prioritario en ese contexto ya que además de altos precios y cesantía, hubo problemas de desabastecimiento.

Cuando Pedro Aguirre Cerda presentó su candidatura presidencial en 1938, utilizó dos eslóganes principales: "gobernar es educar" y "pan, techo y abrigo". Ambas frases se refieren al interés que tuvo por estimular la producción nacional y su esfuerzo por promover políticas públicas enfocadas en solucionar carencias sociales básicas.

La importancia que se le dio al desarrollo del individuo estaba en directa relación con el énfasis que se puso en el ideal de ser una nación fuerte y moderna. Estas nociones no eran nuevas, sin embargo, la expresión que tuvieron durante el gobierno de Aguirre Cerda si lo fue. Luego de décadas de inestabilidad política y económica, hacia la segunda mitad de los años treinta, el país finalmente alcanzó un cierto grado de mejora. Esto permitió enfocarse en la alimentación como un elemento fundamental para mejorar la calidad de vida de las personas.