Si bien la producción de Mercedes Marín ha sido mayormente vinculada a la poesía, la autora escribió retratos y elogios de la vida de figuras públicas del siglo XIX, dos de los cuales fueron publicados en la Galería nacional o Colección de retratos de hombres célebres de Chile (1854), libro en el que Marín fue la única mujer colaboradora.

La Galería nacional o Colección de retratos de hombres célebres de Chile fue un libro editado en Chile por el francés Narcisse Desmadryl (1801-1881), que presentó cerca de cincuenta biografías escritas por distintos intelectuales del siglo XX, entre ellos, Domingo Faustino Sarmiento (1811-1888), Miguel Luis Amunátegui (1828-1888), Diego Barros Arana (1830-1907), Joaquín Blest Gana (1832-1880), Rafael Minvielle (1800-1887), Carlos Bello (1815-1854) y José Antonio Torres (1828-1864). La Galería… incluyó, además, retratos grabados a página completa realizados por el mismo editor (Dedieu, Jean Pierre; Enríquez, Lucrecia y Cid, Gabriel. "Fabricación heroica y construcción de la memoria histórica chilena (1844-1875)". Caravelle. Número 104, 2015, p. 50). Las figuras biografiadas fueron "destacados militares, políticos y miembros del clero de la época de la independencia y de los gobiernos conservadores, 49 en total, 8 de los cuales estaban vivos" (Enríquez, Lucrecia. "Los héroes chilenos decimonónicos y su inclusión museográfica". Mélanges de la Casa de Velázquez. Volumen 47-1, 2017. Consultado 10 noviembre 2021).

En la introducción del libro, se indicó que los biografiados fueron hombres que "saliendo de la esfera común, dan un sello particular a sus obras e imprimen su carácter a los sucesos en los que toman parte" y mencionó que el propósito de la obra era llenar un vacío, pues "de muchos de estos personajes aún no se conoce definitivamente la parte que tomaron en los acontecimientos políticos que cambiaron la faz de su propio país (Irisarri, Hermógenes de. "Introducción". En Desmadryl, Narciso. Galería nacional, o, Colección de biografías i retratos de hombres celebres de Chile. Santiago: Impr. Chilena, 1854, p. XIII).

Los textos con los que colaboró Marín fueron "Don José Gaspar Marín", quien era su padre, y "Don Manuel Vicuña", capítulos en los que presentó estas figuras públicas del siglo XX de forma elogiosa. Ambos capítulos correspondieron a versiones aumentadas de escritos que la autora había publicado previamente, con diferente título tras el fallecimiento de estos personajes.

El 12 de abril de 1839, apareció "Necrología del Sr. D. Gaspar Marín, ministro de la Suprema Corte de Justicia" en el diario El Araucano. Este texto, en comparación con el que apareció en la Galería nacional…, "no solo es más breve, sino que también resulta más permisivo en la introducción de la subjetividad de la autora. Prueba de ello es, por ejemplo, el uso de marcas textuales como el empleo de la primera persona singular ('y si puedo explicarme de este modo'). Sin embargo, tal vez el elemento que más lo distancia del trabajo de 1854 es la ausencia de una voluntad que reafirme el carácter objetivo y, por ende, histórico de la narración" (Contreras, Joyce. "Nota 534". En Marín del Solar, Mercedes. Mercedes Marín del Solar (1804-1866): obras reunidas. Santiago de Chile: Ediciones de la Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos. Centro de Investigaciones Diego Barros Arana, 2015, p. 618).

Por su parte, la primera versión del texto sobre el sacerdote Manuel Vicuña (1778-1843) fue publicado en 1843 en formato cuadernillo con el título Elogio histórico del Ilustrísimo señor don Manuel Vicuña, Primer Arzobispo de esta Santa Iglesia Metropolitana de Santiago de Chile, sin firma de la autora. La versión de 1854 así como el texto sobre José Gaspar Marín (1772-1839), sí fueron firmados.

En relación con la recepción de la colaboración de Marín en la Galería…, el 26 de enero de 1856 apareció un comentario anónimo sobre esta biografía, en el que se criticaba la falta de objetividad de la misma al ser un escrito elaborado "por una hija, circunstancia penosa que quita a esta pieza histórica el sello de imparcialidad que debía tener". Marín respondió esta crítica indicando que su obra había sido revisada por ella "con meditación" y que la primera ley que se impuso "al escribir la biografía del Sr. Marín fue guardar a la verdad el más escrupuloso respeto. Documentos importantes que me presentaron, conversaciones con mi madre que era señora de mucho talento, mis propios recuerdos y las confianzas con que mi padre siempre me había favorecido; he aquí lo que me ha servido de guía para la composición de mi obra, habiendo tenido siempre el cuidado más estricto de escribir solo aquello de que podía estar enteramente segura [...]. Mi biografía ha sido revisada con meditación" (Contreras, p. 71-72).

El texto sobre la vida de Gaspar Marín ha sido considerado como parte de la producción de biografías familiares escritas por autoras latinoamericanas del siglo XIX. En relación con estas, se ha mencionado que contribuyeron "de forma positiva no solo a elaborar la historia nacional poscolonial tomando como referente a la familia (lugar culturalmente asignado a lo femenino y 'núcleo de la base política republicana')", sino que, además, ayudaron "a posicionar a las mujeres de la élite en tanto sujetos agentes dentro del proyecto de edificación nacional, así como dentro de la dinámica segregadora y mascultista de la ciudad letrada" (Davies, Catherine citada por Contreras Villalobos, Joyce. "Aproximación a la escritura y labor intelectual de Mercedes Marín del Solar (1804-1866)". En Marín del Solar, Mercedes. Mercedes Marín del Solar (1804-1866): obras reunidas. Santiago de Chile: Ediciones de la Dirección de Bibliotecas, Archivos y Museos. Centro de Investigaciones Diego Barros Arana, 2015, p. 69-70).