Las primeras revistas sobre cine en Chile surgieron a mediados de la década de 1910. En 1915 nacieron Chile cinematográfico y Cine gaceta. Si bien estas publicaciones no tuvieron una vida muy duradera, generaron un importante efecto de demostración, impulsando el surgimiento de nuevas revistas, como La semana cinematográfica y El film ambas creadas en 1918. Lo interesante de este proceso es que se pueden encontrar publicaciones en diversas ciudades del país, desde Copiapó hasta Punta Arenas. A través de la lectura de sus ejemplares se puede advertir que el cine era una actividad tremendamente dinámica en las primeras décadas del siglo XX. En ellas se pueden encontrar reseñas y críticas de películas, ofertas de productos y servicios de casas nacionales y extranjeras, carteleras de programas, educación técnica sobre la nueva tecnología, novedades, chismes, etc. Pese al intenso movimiento del mercado cinematográfico, habría que esperar hasta fines de la década de 1920 para encontrar revistas duraderas, que a lo largo de varias décadas formarían al espectador chileno en las artes cinematográficas: las revistas Boletín Cinematográfico (1928) y Ecran (1930), ambas en función hasta comienzos de 1970.