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Conflictos en la junta militar de gobierno

Si bien una parte importante de los militares compartía la necesidad de intervenir en el convulsionado escenario político de 1973, esto no implicó una automática homogeneidad ideológica entre sus miembros, y pronto se visibilizaron sus diferencias en torno al proyecto económico que deseaban para la sociedad chilena. Esta discusión quedaría plasmada en la contraposición entre la vertiente militar, adherida a un modelo nacional-corporativista, y quienes abogaron por un proyecto centrado en una economía de mercado. Este debate marcó el principal conflicto ideológico de la primera época de la dictadura militar hasta 1978.

Tanto el proyecto nacional-corporativista, cuyos principales defensores eran los generales Gustavo Leigh y Oscar Bonilla, como el proyecto neoliberal, con una fuerte adhesión en la Armada, coincidían en la necesidad de transformar el Estado y desvincularlo del control que sobre él tenían los partidos políticos, así como también convenían en la consolidación de un equilibrio armónico entre desarrollo económico y progreso social. La diferencia radicaba en que los primeros adoptaron una posición que buscaba continuar con la tradición estatista de control relativo de la economía, mientras que los segundos situaban en el gobierno militar la posibilidad de organizar el país sobre nuevas bases. El proceso que llevaría al triunfo de la matriz neoliberal y a la implantación de su proyecto modernizador acompañó también la consolidación del "poder unipersonal" del general Augusto Pinochet (Verónica Valdivia, "Estatismo y neoliberalismo: un contrapunto militar. Chile 1973-1979", pág. 171). Las sucesivas reorganizaciones ministeriales del gobierno militar, el retiro desde 1974 de un número significativo de oficiales, la entrada de los Chicago boys a los más altos cargos del manejo económico nacional, y la intensificación del desmantelamiento estatal desde 1975 (año en que CORFO comenzó a restablecer el conjunto de las empresas del área estatal a manos privadas), marcarán los hitos de esta disputa que alcanza su fin en 1978 con la salida de Leigh de la Junta Militar y el diseño de las reformas estructurales neoliberales. Finalmente, la síntesis entre neoliberalismo y corporativismo, con predominio del primero por sobre el último, fue refrendada en la Constitución de 1980, proclamándose el carácter "subsidiario" del Estado como reconocimiento y respeto a la autonomía de los "cuerpos intermedios" de la sociedad civil, para asumir tan sólo aquellos fines que los particulares no pudiesen cumplir. Esta síntesis es, por lo demás, la base doctrinal que hasta hoy acompaña a la derecha política, y especialmente a la Unión Demócrata Independiente UDI.