De los números que componen la función del circo en Chile, no cabe duda alguna que el tony o payaso ha sido tradicionalmente uno de los personajes más importantes. Existen varios tipos de payasos y en Chile se desarrollaron con gran maestría los "tony" y los "clown". El tony es el payaso bobo que hace de contrafigura al clown, el payaso serio. El clown era originalmente el payaso de cara blanca, que vestía de elegante mameluco y sombrero de cucurucho. Los clown más recordados son Fernando Gil, el clown Montes de Oca y el inolvidable Hernán "Pollito" Pérez. De los grandes payasos recordamos al emblemático Tony Chalupa, Alberto Díaz Moscoso, que deleitó al público durante las primeras décadas del siglo XX junto al payaso poeta Nicolás Maturana. Durante las décadas del cincuenta y sesenta, payasos que alcanzaron gran notoriedad en Chile y el extranjero fueron el gran Tony Chicharra (Juan Ramírez), el Tony Colihue (Héctor Aguilera), el Tony Chamaco (Orlando Paredes), el Tony Bombilla (Fernando Órdenes), el Tony Lechugan (Orlando Campusano), entre tantos otros.

El tony más famoso y querido de la historia circense chilena fue Abraham Lillo Machuca. Mejor conocido como el Tony Caluga, este carismático payaso fue el fundador del clan de los Caluga, que hoy tiene su propio circo.

De pequeño, a los nueve años de edad, abandonó su hogar en Sierra Gorda buscando su destino en varios circos rurales donde se expuso a la suerte de toda la gente del gremio. Más tarde se incorporó al famoso circo de los "Hermanos Corales". Sin embargo fue en el circo del señor Venturino, "Las Águilas Humanas", donde se formó como payaso propiamente tal. Con el Teatro Caupolicán como escenario, comenzó a ser el centro de atención descubriendo en su personaje el heredero de la tradición del tony de los circos chilenos. El éxito no tardó en llegar, Abraham Lillo se convirtió en una figura de fama internacional levantando posteriormente su propio circo, el Circo de los Veinte Payasos, en el cual trabajaron renombrados payasos chilenos. Su espectáculo iba dirigido especialmente a los niños, de hecho, se preocupaba de repartir entradas entre los niños huérfanos y enfermos cada vez que llegaba a alguna ciudad.

El Tony Caluga fue también presidente del Sindicato Circense de Chile. Bajo su mando se desarrollaron importantes iniciativas destinadas a conseguir leyes que favorecieran a los artistas, entre ellas, la ley de previsión para los artistas circenses. Tras haber defendido toda su vida la importancia del circo como tradición nacional, Abraham Lillo Machuca murió el 17 de julio de 1997 a los 81 años de edad.