En esta institución las reformas implicaron la inclusión femenina en la totalidad de las especializaciones y funciones castrenses, marcando la diferencia con las otras ramas de las Fuerzas Armadas. Además, la implementación de esta apertura se adelantó a la política de integración del Ministerio de Defensa. La explicación que se esgrime para la profundidad de la inserción lograda, es la mayor tecnología involucrada, eliminando la limitación física como argumento para la exclusión femenina. Asimismo, la tecnología en las acciones de combate directo disminuiría el potencial riesgo de perder la vida en un enfrentamiento.

Los cambios en la normativa son notorios porque la Fuerza Aérea tardó bastante en aceptar a las mujeres en sus filas fuera de la categoría de Servicios. La presencia femenina se observó desde 1952 en labores de secretaría, enfermería y más tarde como dentistas, abogados, sanitaristas y auxiliares de éstos. El grado de Oficial fue posible de alcanzar en estos oficios, sin embargo el acceso a funciones de aeronáutica era exclusivamente masculino. El cambio se produjo en 1981 con la apertura de la conscripción femenina voluntaria que incluía la posibilidad de capacitación técnica básica en salud y secretariado. Se proyectaba su inserción en la institución en calidad de civiles o de Suboficiales en la categoría de Servicios, pero contando con preparación militar, algo nuevo. La vigencia de la incorporación femenina mediante el Servicio Femenino Voluntario se mantuvo hasta 1991, cuando se satisfizo el requerimiento de personal femenino sanitario auxiliar del Hospital de la FACH.

Recién el año 2000 se permitió el ingreso de mujeres a la Escuela de Aviación en las carreras de Línea, disponiendo de escalafones como, por ejemplo, el de Ingenieros, de Defensa Antiaérea y Fuerzas Especiales, Informática y de Telecomunicaciones. El ingreso de mujeres a la Escuela de Especialidades, para formarse en la categoría de Suboficiales sólo se abrió el 2009.

Hoy las mujeres pueden optar a los mismos grados y escalafones que sus pares hombres y pueden, según la normativa, ascender hasta el círculo de mando. El año 2003 se graduó la primera promoción mixta, con un 30% de participación femenina.