Enrique Lafourcade declaró que en su vida siempre puso grandes esperanzas en el amor. Por eso todos sus libros tienen que ver con mujeres, amigos y con la gente que ha amado. Así, muchas de sus novelas parten de alguna experiencia de vida y, generalmente, asociadas a alguna mujer.

También le ha escrito al erotismo. Un ejemplo de ello es La cocina erótica del Conde de Lafourchette: una recopilación de las mejores crónicas, recetas y consejos del conde Henri de Lafourchette, personaje creado hace más de 20 años por el autor en el suplemento de "Gastronomía y turismo" de El Mercurio. La primera vez que apareció en un libro fue en 1983 en Los refunfuños; de M. de Compte Henri de Lafourchette.

El conde es un personaje dedicado al arte, al amor, a la cocina, a las aventuras, a los viajes y a los sueños. Es chileno y proviene de una vieja familia de vascos franceses residentes en Chile. Fue educado en Europa, fue millonario y tuvo grandes amores y aventuras, pero ahora es un pobretón que vive en la calle 18 en una pieza arrendada que pagan sus sobrinos nietos o antiguas amigas.

Muchos dicen que el conde Henri de Lafourchette es el alter ego del autor, "mentiroso como pocos, sabio como nadie, quien dedica recetas afrodisiacas a sus amadas, contando toda suerte de alcoba y cocina".