A pesar de estar relegada a los estratos más humildes de la población, la Lira Popular tuvo momentos en los que adquirió especial relevancia pública en cuanto espacio de opinión popular. En ese sentido, las coyunturas bélicas del último tercio del siglo XIX proporcionaron una oportunidad única a los poetas populares para difundir sus ideas y opiniones, así como un amplio repertorio de noticias que eran divulgadas en los pliegos de versos impresos.

La Guerra Civil de 1891, entre el presidente José Manuel Balmaceda y el Congreso, fue una de aquellas raras ocasiones en las que la Lira Popular salió a la palestra pública. Con cierto oportunismo político, los poetas populares celebraron la caída de Balmaceda y criticaron ácidamente las medidas tomadas por el derrocado presidente para acallar a la oposición, lo que no fue obstáculo para que con el paso de los años se suavizara esa postura y se llegara a recordar con nostalgia los años de su administración, en contraposición a los nuevos gobiernos surgidos tras la victoria del Congreso en 1891.

Presentamos a continuación una investigación de la historiadora Micaela Navarrete acerca de la evolución de la opinión de los poetas populares y editores de periódicos satíricos sobre el gobierno de Balmaceda y la Guerra Civil de 1891.