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fútbol profesional

Al comenzar la década de 1930 los cientos de clubes y ligas amateurs estaban liderados por la Federación de Fútbol de Chile, inscrita en la FIFA desde el 31 de diciembre de 1912. Tras surgir la Liga Profesional, donde los jugadores cobrarían un sueldo por jugar y habría transferencias remuneradas por el traspaso de jugadores de un club a otro, los clubes profesionales se organizaron en la Asociación de Football Central, que en 1951 se denominaría Asociación Central de Fútbol. Al mismo tiempo, los clubes amateurs se organizaron en la Asociación Nacional de Fútbol Amateur de Chile, siendo ambas instituciones miembros de la Federación de Fútbol de Chile.

En el ámbito profesional la Asociación Central de Fútbol era el organismo encargado de organizar y reglamentar la competencia. Con el tiempo tuvo dos divisiones: la División de Honor y la Segunda División -hoy Primera B-, donde los clubes nuevos comenzaban su participación profesional. Por un problema de costos la competencia estuvo circunscrita a clubes de la capital hasta 1944, año en que se permitió el ingreso de clubes de Viña del Mar y Valparaíso y, posteriormente, a otros clubes de provincia hasta constituirse a fines de la década del cincuenta en un campeonato de fútbol nacional.

A partir de la década de 1960, el campeonato se organizó en dos ruedas, con 18 equipos entre 1962 y 1980, y 16 entre 1987 y 2003, clasificando el campeón y el subcampeón a la Copa Libertadores de América. Los dos equipos que terminaban en los últimos lugares bajaban a la Segunda División siendo reemplazados por el campeón y subcampeón de esta división. El 2002 el campeonato adquirió la forma de la competencia del fútbol mexicano, con torneos rápidos de una rueda (Apertura y Clausura) y fase de play-offs para definir al campeón.

En el ámbito institucional la Asociación Central de Fútbol se constituyó como la Asociación Nacional de Fútbol Profesional de Chile (ANFP) en 1987, siendo esta entidad la encargada de la organización de los campeonatos de fútbol profesional, de ejercer la supervigilancia deportiva y correccional sobre todos los clubes que la conforman, y actuar como órgano contralor de los clubes y de los campeonatos de Primera División y Primera B, con 32 clubes asociados.