Juventud: poesía romántica
Juventud: poesía romántica (1909) es el primer poemario publicado de Max Jara. En los poemas que componen este volumen se advierte el tono romántico predominante en la poesía de la época, sin excesivas metáforas o adornos innecesarios; siempre dirigidos a la emoción libremente expresada. En este volumen, Max Jara dedicó algunos romances a Rafael Maluenda, Roberto Orihuela, Carlos Mondaca y Amanda Labarca, entre otros. La crítica especializada reconoció en este libro la influencia de Pedro Antonio González, pariente y amigo cercano de Jara con el que compartió sus primeros pasos en el oficio poético. Además destacó el lenguaje sencillo de estos versos, apegados a una métrica tradicional y la variedad de temas abordados.
Su labio
¿Su labio, cual fragmento de hostia;
su labio, débil pétalo muriente
del marchito capullo de una rosa
que alumbra el sol poniente!
El habla de su boca me da fiebre;
su frase, latigazo de firmeza;
su canto, como flores de pesebre
sobre un verdoso charco: la tristeza.
Su lengua guarda el nido de la preces,
y sus plegarias llevan a la altura
el lloroso rumor de los cipreses
de sus trágica selva: la amargura.
Y el roce doloroso de su boca
sobre la enferma flor de las ciudades,
estéril mas que el flanco de una roca,
dice de interminables soledades.
Y el gesto de su labio, cual reproche,
su risa, vana chispa que no arde;
la sombra de su labio, toda la noche;
el beso de su labio, todo arde!
Y el beso de su labio me sonroja;
dentro mi corazón es frío y peso:
la beso, y al besarla, en cada beso,
parece que me diera una congoja...
(Jara, Max. Juventud: poesía romántica. Santiago: Impr. Barcelona, 1909. Páginas 31-32)
