Mediodía
"Todo el día cantaban zorzales en la plaza.
Tú nunca hacías nada. Te pasabas el tiempo
descansando con dulce fatiga y desconsuelo.
¿Recuerdas esos bancos que el musgo suavizaba?
Jamás oímos música, sino cantos de pájaros,
Sólo brisa que iba de una hoja a otra de los álamos.
(La olaza espía lluvias. Es víctima del sol
Y en las noches se hiela con desnudez de luna).
¡Recuerdas las naranjas pesadas que caían
Y la campana rota de la iglesia ruinosa?"
(Luis Oyarzún, "Plaza de pueblo" en Mediodía, p.55)