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Centro de Danza Espiral

En 1984, Patricio Bunster y su ex mujer Joan Turner regresaron del exilio a Chile y comenzaron a impartir talleres en el Café del Cerro, en Bellavista, donde se había concentrado el movimiento de danza independiente.

La experiencia los convenció de la necesidad de abrir una academia que sistematizara la formación de la nueva generación de bailarines y recuperara la experiencia que había quedado trunca el 11 de septiembre de 1973.

Bajo ese precepto, el 5 de marzo de 1985 se inauguró el Centro de Danza Espiral, que cobijó a la Compañía de Danza Espiral, cuyo debut se concretó en enero de 1986, durante el Primer Festival Víctor Jara. Allí presentaron la pieza A pesar de todo, remontaje de la coreografía estrenada por Patricio Bunster en 1975 en el exilio y que sintetizaba su experiencia en el gobierno de Salvador Allende, rescatando la figura del joven combatiente.

Tanto el centro de formación como la compañía, dinamizaron la escena de la danza local y se convirtieron en un referente para la restauración del movimiento de coreógrafos independientes.

El fuerte impulso de las universidades privadas extendió el campo de colaboración y Patricio Bunster pasó a hacerse cargo de la Carrera de Danza de la Universidad Academia de Humanismo Cristiano, cuya formación se realiza en conjunto con el Centro Espiral.

La compañía, radicada actualmente en la sede del barrio Brasil, mantiene activo el repertorio de piezas de Bunster, gracias a que, en sus últimos años, este se abocó a remontar sus principales coreografías en la serie Antología I (2005) y Antología II (2006), presentadas en el Centro Cultural Matucana 100.