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secciones de corte periodístico

Pluma y lápiz fue una revista de corte fundamentalmente literario, pero también con espacio para la actualidades. En virtud de la experiencia adquirida durante su trabajo en diarios como La Ley, Marcial Cabrera Guerra supo imprimirle un viso de contingencia a la publicación, reflejando además en sus páginas el espíritu liberal que lo caracterizaba. Los sucesos del momento eran abordados desde una perspectiva crítica a través de columnas de opinión, crónicas de la vida urbana, comentarios de arte, literatura y espectáculos y biografías de intelectuales.

Muchos narradores, poetas y críticos desarrollaron en Pluma y Lápiz una labor periodística paralela a su producción propiamente literaria. Entre los escritores célebres que colaboraron en secciones fijas de la revista, están Pedro E. Gil («Antuco Antúnez») con sus «Charlas domingueras», columnas cargadas de ironía, a veces escritas en verso; el poeta Víctor Domingo Silva («John Pencil»), con la sección «Desde el puerto»; Manuel Magallanes Moure («Barbouilleur»), con la sección «Garabatos»; y Osvaldo Palominos («Gastón»), con «Vida de Santiago». El mismo Marcial Cabrera Guerra comentaba la actualidad bajo el seudónimo de «Jean Guerrette» o bajo su mismo nombre cuando ameritaba exponer cierto punto de vista en calidad de fundador de la revista. Entre algunas curiosidades de sus páginas puede encontrarse una crónica de viajes de Tótila Albert, escrita cuando el destacado escultor tenía sólo diez años de edad.