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Alfonso Letelier Llona (1912-1994)

Alfonso Letelier Llona (1912-1994) es considerado uno de los principales artífices del desarrollo de la composición e institucionalidad cultural del siglo XX chileno. Estudió piano con Raúl Hügel y armonía y composición con Pedro Humberto Allende, titulándose luego de compositor en el Conservatorio Nacional de Música; paralelamente estudió Agronomía en la Universidad Católica de Chile, graduándose en 1934. Estos estudios no fueron indiferentes a su formación musical, pues la vida en el campo le entregó material e inspiración para algunas obras sinfónicas, como Vida del campo, para piano y orquesta (1937).

La actividad musical de Letelier se orientó básicamente a la creación de música religiosa y coral (con influencia del canto gregoriano y el canto modal en general), dándole particular importancia a la poesía y el texto como vehículos para la transmisión del mensaje musical, aunque nunca abandonó los formatos grandes (gran orquesta) e intermedios (orquesta de cámara). Tanto su música sinfónica como su música de cámara (para piano y vocal) se mueven con versatilidad entre diversos estilos: el impresionista, de gran riqueza tímbrica y orquestación colorida (como Aculeu, 1955); el neoclásico, menos común y más cercano a la tradición clásico romántica (Divertimento, 1955); y el contemporáneo, que incluye algunos procedimientos como el dodecafónico (Preludios vegetales, 1967-1968, con ciertas libertades técnicas); y también las técnicas seriales (La alfombra de la vida, 1968), entre otras. Sin embargo, a pesar de su diversidad estilística, Letelier fue básicamente un compositor de estética expresionista, cercano siempre al dramatismo, la hondura, la angustia y la visión profunda y atormentada de la vida que emana desde la metafísica del hombre y de la misma profundidad de la naturaleza.

Letelier ocupó muchísimos cargos de importancia durante su vida académica en la Universidad de Chile, sólo comparables a los ejercidos por Domingo Santa Cruz: fue Presidente de la Asociación Nacional de Compositores (1950-1956), miembro de la directiva del Instituto de Investigación Musical (1951 y siguientes), tres veces Decano de Facultad de Ciencias y Artes Musicales de la U. de Chile (1952-1962), Director de la Revista Musical Chilena (1957) y vicerrector de la misma casa de estudios, en el período de Juan Gómez Millas (1953-1963). Asimismo, colaboró en la creación de la Escuela Moderna de Música (1940), junto a René Amengual, Juan Orrego Salas y Elena Waiss. En 1966 fue admitido como miembro de la Academia de Bellas Artes y en diciembre de 1968 recibió el Premio Nacional de Arte mención música.

Una de las particularidades de su gestión en la Universidad de Chile fue haber trasladado todos los servicios musicales de la Universidad de Chile a su actual locación, Compañía 1264, en 1960.