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producción poética de autores jóvenes a partir de la década de 1980

De una u otra forma las antologías de poetas jóvenes son apuestas literarias cuyo objetivo es proponer un conjunto de nombres que en el futuro debiera consolidarse a partir de la continuidad de su trabajo. A diferencia de grandes antologías de poetas fundamentales o de un siglo en las cuales se agrupan poetas con una vasta y reconocida trayectoria, las antologías de jóvenes son una carta de presentación para autores cuyo recorrido es incipiente.

Para los poetas chilenos de la década de 1980 las antologías de poesía cumplieron un papel fundamental al momento de difundir sus trabajos en tiempos en que la censura era una práctica común y la calidad de las ediciones individuales era precaria. Las antologías hicieron converger voces que con el tiempo se fueron consolidando en la escena poética chilena. Tres de ellas fueron Poesía para el camino (1987), 16 poetas chilenos (1987) y Entre la lluvia y el arcoiris: algunos jóvenes poetas chilenos (1983).

En Poesía para el camino destacan Armando Rubio, Cecilia Atria, Alberto Rojas, Erick Pohlhammer, Ricardo Willson, Antonio Gil y Bárbara Délano, entre otros. Por su parte, en 16 poetas chilenos, destacan Miguel Arteche, Floridor Pérez, Federico Schopf, Gonzalo Millán, Soledad Fariña, Elvira Hernández, Mauricio Redolés, Teresa Calderón, Eduardo Llanos, José Maria Memet y Malú Urriola. Finalmente, en Entre la lluvia y el arcoiris: algunos jóvenes poetas chilenos se pueden encontrar poemas de Gonzalo Millán, Javier Campos, Raúl Zurita, Gregory Cohen, Roberto Bolaño, Mauricio Redolés, Erick Pohlhammer, Jorge Montealegre, José María Memet, Bruno Montané y Bárbara Délano.

En la década de 1990, tres antologías intentaron dar cuenta del panorama "joven" de la poesía chilena: Antología: 22 voces de la novísima poesía chilena (1994) preparada por Carlos Baier y Cristián Basso; Poesía chilena para el siglo XXI: veinticinco poetas, 25 años (1996), compilada por Mario Andrés Salazar, Floridor Pérez y Thomas Harris y Antología de la poesía joven chilena: poesía de fin de siglo (1999), selección y notas de Francisco Véjar. En ellas destacan autores que con los años han ido demostrando, con nuevos libros publicados y concursos de poesía ganados, que su inclusión fue acertada: Javier Bello, Leonel Lienlaf, Rafael Rubio, Francisco Véjar, Malú Urriola, Andrés Anwandter, Germán Carrasco, Damsi Figueroa, Cristián Gómez, Yanko González, Marcelo Pellegrini, David Bustos, Julio Carrasco, Alejandra del Río, Kurt Folch, Adán Méndez, Armando Roa Vial, Leonardo Sanhueza y Alejandro Zambra.

El 2004 trajo consigo la antología, preparada por el Premio Nacional de Literatura Raúl Zurita, Cantares: nuevas voces de la poesía chilena, a la que siguió en 2006 Diecinueve (poetas chilenos de los noventa), compilada por Francisca Lange Valdés. Ambas antologías repiten algunos nombres publicados ya en los noventa, pero a la vez proponen otros que empiezan a mostrarse constantemente en la escena poética nacional: Antonio Silva Fuentes, Cristián Cruz, Gabriel Silva, Marcelo Guajardo, Rosario Concha, Claudio Gaete, Paula Ilabaca, Héctor Hernández Montecinos, Felipe Ruiz, Gladys González, Pablo Paredes, Diego Ramírez, Felipe Cussen y Verónica Jiménez.