Esta publicación es probablemente una de las revistas de cine más completas que se hayan publicado en Chile. Recogiendo el imperativo de considerar al cine como arte, no descuidó sin embargo el aspecto industrial de éste, preocupándose también de los aspectos económicos de diversas cinematografías del mundo, con especial énfasis en la chilena. Surgida en Valparaíso en 1972, fue publicada por la editorial de la Universidad Católica de Valparaíso, lo que no fue un detalle, ya que la revista tuvo un tono académico explícito: "nuestra tarea se ubica en el plano de unir los términos 'Cine' y 'Universidad', de tender un puente entre el quehacer académico y el conocimiento científico y esa inmensa usina de mitos, espejo de nuestro tiempo e instrumento de liberación humana, que es este arte de las imágenes en movimiento". Las perspectivas al interior de la revista fueron plurales, algunas más politizadas que otras, pluralidad que se observa en los nombres que allí firman: Héctor Soto, Hvalimir Balic, Aldo Francia, Agustín Squella, José Román. Si bien la revista sólo alcanzó los 5 números y poco más de un año de circulación, cada ejemplar llegaba a las 100 páginas, ofreciendo a los lectores una contundente visión sobre el cine.