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Patas de perro

"Creo que vida y muerte están tan imbricadas que no se pueden separar. Además, los temas míos los cojo de la vida y la vida es violencia, miseria e injusticia (...) pero de una violencia suavizada por la imaginación y profundización del escritor (...) quiero reflejar además el desorden, el caos que vive el mundo. Creo que tengo la obligación de ello. Si no escribo así, cometo una trampa literaria". Con estas palabras el autor de Patas de Perro, define una característica fundamental de su creación literaria. Carlos Droguett, nació en Santiago en 1912 y forma parte de la Generación Literaria de 1938. En 1953, publicó Sesenta muertos en la escalera, con la que obtuvo el primer premio en el concurso de Novelas de Editorial Nascimento y el premio Municipal de Santiago. A esta le seguirían Eloy (1960) y Patas de perro (1965), Todas esas muertes, con la que obtuvo el premio Alfaguara 1971, entre otras. En 1970 recibió el Premio Nacional de Literatura.

Patas de Perro, es una novela en que la ficción se cruza con la realidad para contar la historia de Bobi, un niño que nació con patas de perro. Según el propio autor, la historia narrada en esta novela está basada en una noticia aparecida en un diario, en la que se destaca la vida de un niño que nació con una deformidad que lo condenó a una vida dolorosa y marginal. Droguett proyecta este personaje como símbolo de la trangresión no deseada que le permite mostrar la crueldad, la morbosidad y la marginación extrema del entorno social que rodea al personaje.

En la novela, el protagonista, mitad perro, mitad niño, lucha constantemente por encontrar su identidad, una imagen de sí mismo que unifique su ser. En esta búsqueda, Bobi conoce la marginación desde temprana edad. Su familia es la primera en estigmatizarlo, evidenciando su rechazo a través del odio, la crueldad y la intolerancia. Del mismo modo, el mundo que Bobi va reconociendo a medida que crece, lo condena a la soledad, dejando como único espacio de integración social: su trabajo en un circo, en el que su "diferencia y deformidad" son valoradas sólo en términos de atraer público, de hacer dinero con su triste condición humana.

A través del monólogo interior y del estilo indirecto libre, elementos estructurantes de la poética de Carlos Droguett, la narración profundiza en la psicología de Bobi y su propio reconocimiento como un "fenómeno", dotándola de un realismo cabal y estableciendo un constante diálogo entre el protagonista, el narrador y el lector. De este forma, el texto mismo sufre las fracturas que afectan a Bobi. El narrador hace juicios, opina de las situaciones que enfrenta el niño patas de perro; el personaje dice y deja de decir para seguir contando su historia. Ambos dialogan acerca de lo narrado, y además, el narrador se encarga de reflejar lo que sucede en el entorno del personaje, como realmente se comportan frente a su "diferencia", lo que son capaces de decir y aquello que permanece invisible, escondido dentro los seres que rodean a Bobi y que guarda el más violento rechazo a su condición.