"Revista de modas" fue una sección no permanente del periódico La Mujer que apareció por primera vez en la octava edición, el 7 de julio de 1877. Posteriormente, se publicó en los números 12, 13 y 17. La sección se orientó a presentar las tendencias de la moda europea y fue dirigida especialmente a un público femenino.

La sección estuvo a cargo de la vizcondesa de Castelfido, quien fue una colaboradora de La moda elegante, revista española publicada en Cádiz, en la que la autora mantuvo una sección sobre moda desde la década de 1870 con textos que enviaba desde París.

Los artículos de Castelfido fueron también conocidos en México a través de la circulación de la revista La moda elegante y por medio de la reproducción de sus textos en medios mexicanos, como Diario del Hogar y La voz de México (Pérez, María. "Modas francesas para las mexicanas durante el porfiriato a través de España". Hispanófila. Volumen 191, 2021, p. 159). Sus artículos aparecieron además en el medio peruano La Bella Limeña: periódico semanal para las familias, con una sección titulada 'Revista de modas' (Arroyo, Carmen. La Moda Elegante Ilustrada en el período de entreguerras (1918-1927). Análisis documental. Tesis para optar al grado de Doctora en Ciencias de la Información. Universidad Complutense de Madrid, 2017, p. 255-256). En La Mujer, se indicó en los números 8 y 13 que los artículos de la sección "Revista de modas" fueron una reproducción de La moda elegante, mientras que en los números 12 y 17 no apareció esta especificación, aunque se indicaba que eran enviados desde París.

Este conjunto de textos apareció en un periodo en que en algunos medios chilenos se estaban discutiendo los alcances del lujo en la sociedad, entre cuyas expresiones se incluía la moda femenina. Intelectuales como Rosario Orrego (1831-1879) y Lucrecia Undurraga (1826-1914), directora de La Mujer, mostraron su posición crítica respecto al lujo en la Revista de Valparaíso (1873-1874) en 1873. Al año siguiente, Marcial González (1819-1887) también intervino en la discusión con su artículo "Nuestro enemigo el lujo" publicado en la revista Sud-América (1873-1874). En el mismo periódico La Mujer, en su primer número, apareció el texto "El lujo" de Isabel Le Brun Reyes (1845-1930), quien se refirió al lujo como una "gangrena del cuerpo social, el aniquilamiento de toda fortuna, la desgracia de la mayor parte de las familias, y que lleva las más veces en pos de sí la corrupción, que concluye por la ruina de las naciones, aunque hayan llegado a su mayor apogeo en riquezas, en ilustración, en ciencias y artes" (Le Brun, Isabel. "El lujo". En Ramírez, Verónica y Ulloa, Carla. La Mujer (1877): el primer periódico de mujeres en Chile. Santiago: Cuarto Propio, 2018, p. 48).

Si bien la temática relativa a la moda en La Mujer fue un discurso secundario respecto a otros propósitos políticos de inclusión de las voces de mujeres en el espacio público, evitando "el reforzamiento del estereotipo femenino tradicional, excluyendo todo lo relacionado con la moda" (Montero, Claudia. "Trayectorias de las editoras profesionales del fin del siglo XIX en Chile". Estudios filológicos. Número 64, diciembre 2019, p. 106), "Revista de modas" dio cuenta de un interés de la época alineado con lo que otras lectoras de Europa y Latinoamérica estaban leyendo.

La vizcondesa de Castelfido era una referencia en materia de modas en dichos públicos, "especialmente para las lectoras de habla hispana". Así, se ha mencionado que la popularidad de esta escritora "en el escenario español, sin duda, fue uno de los motivos que gestó su aparición en el periódico chileno. En consecuencia, esta sección, entre otras informaciones, muestra el tipo de redes internacionales que habían establecido las mujeres que dirigían La Mujer" (Ramírez, Verónica y Ulloa, Carla. "Estudio preliminar". La Mujer (1877): el primer periódico de mujeres en Chile. Santiago: Cuarto Propio, 2018, p. 34).

En general, los artículos de "Revista de modas" tenían un desfase de tres meses entre el momento de su producción y el de su publicación en la sección de La Mujer, razón por la cual se ha planteado que esta tardanza podría deberse "a que algunos de sus textos eran publicados antes en proyectos periodísticos europeos, como la revista española La moda elegante (…), la tardanza de la correspondencia o a la demora de la editora para decidirse a publicar" (Ramírez y Ulloa, p. 34).

En contraste con la visión negativa del lujo que circulaba en los medios y, en particular, de la preocupación excesiva respecto a la moda por las mujeres, en "Revista de modas" se hizo referencia a las tendencias desde un tono informativo, orientado a las necesidades de las mujeres respecto a la vestimenta. Así, por ejemplo, en la primera aparición de la sección, se hizo alusión a los vestuarios que se llevarían en la próxima primavera, en el contexto de situaciones formales como bailes y recepciones, con observaciones referidas a uso de colores, telas y cortes (De Castelfido, V. "Revista de modas". La Mujer. Número 8, 7 de junio de 1877, p. 63).