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Dunas

En la costa sur del Maule, las dunas se extendían desde Pelluhue hasta Punta Carranza, con una extensión de 40 kilómetros, y eran especialmente amenazantes en Chanco. Desde la década de 1830, las dunas avanzaron en esa localidad entre media cuadra y ¾ de cuadra por año. Hacia 1900 habían sepultado unas quince casas e incluso llegaron a menos de dos cuadras de la calle principal. Los vecinos intentaron frenarlas con cercas, pero fueron totalmente insuficientes. Este problema era aún mas grave si consideramos que Chanco era una de las zonas agrícolas mas ricas del Maule. Para entonces, el pueblo tenía 2.300 habitantes, y la parte urbana estaba conformada por quince cuadras edificadas, donde existían dos escuelas de instrucción primaria, 16 tiendas vinculadas con Valparaíso y Concepción, así como veinte despachos y baratillos.

Frente a esta situación, el Estado nombró al zoólogo y botánico Federico Albert para que elaborara un diagnóstico y presentara soluciones para frenar el avance de las dunas. Albert, basándose en la experiencia internacional, recomendó construir cercas y plantaciones, principalmente de eucaliptus, las que dieron excelentes resultados. De esta manera, se levantaron 38 cuadras de cerca, una canalización de 26 cuadras de largo, una siembra de 18 cuadras con cebada y una plantación de mas de cien mil árboles y arbustos. En Pelluhue, a su vez, el funcionario público hizo plantaciones de doca en la franja costera, también con éxito. En honor al científico, fue creada años después la Reserva Nacional Federico Albert, ubicada a medio kilómetro de Chanco.